miércoles, 25 de marzo de 2015

Capacitación medioambiental en escuelas primarias


La presidenta de la Fundación para el desarrollo Social Coatlicue A.C. Maricela Silva Romo, impartió la charla: “La Realidad del unicel en Oaxaca”, realizado en la ciudad de Oaxaca el día 25 de marzo del 2015, invitada por padres de familia el Colegio Atonazin. La charla fue dirigida a niños de quinto año de primaria Durante la charla se señaló que el Estado de Oaxaca, ubicado al sur de México, hay 8431 especies de plantas vasculares, 1431 de vertebrados y más de 3000 de invertebrados, lo que lo hace el estado con mayor riqueza biológica en el país, también se presentaron varias imágenes del impacto ambiental que genera el unicel, en la vida marina, asimismo se hizo una reflexión de cómo afecta el unicel en la salud. Con la participación activa de los niños: se pudo realizar un trabajo satisfactorio y de generación y reproducción del conocimiento, pues los niños son agentes elementares para una cultura del cambio de hábitos de consumo de unicel en la población. Por ello se propuso iniciar con la semana no al unicel en este grupo escolar y en virtud de que salen de vacaciones, a su regreso compartirán experiencias de como combatieron el unicel en vacaciones de semana santa. Es importante impartir talleres de sensibilización del uso del unicel en las escuelas primarias de la ciudad de Oaxaca, de los municipios y comunidades como una estrategia para disminuir la contaminación en nuestro Estado y preservar nuestra biodiversidad; necesitamos solicitar a los medios de comunicación: Revistas, anunciantes y televisoras que no reproduzcan una cultura de consumo: “usar y tirar” sino promover el reciclaje y cuidado del medio ambiente mediante las tres erres”: reducir, reutilizar y reciclar el Unicel; señaló la presidenta de la Fundación para el desarrollo Social Coatlicue A.C.

“Racismo, una agenda pendiente” en Oaxaca


La presidenta de la Fundación para el desarrollo Social Coatlicue A.C. Maricela Silva Romo, asistió al taller: “Racismo, una agenda pendiente”, realizado en la ciudad de Oaxaca los días 23 y 24 de marzo del 2015, impartido por COPERA (Colectivo para eliminar el racismo), cuya sede fue la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca. Durante el taller se presentó el proyecto de carteles de la Campaña: “Así vivimos el Racismo 2014”, la doctora Mónica Moreno Figueroa participó con la charla: “Las vivencias del Racismo”, Estrategias cotidianas de resistencia y lucha contra el racismo y Recuperándonos de las lastimaduras del Racismo, impartidos por Judith Bautista, Mónica Moreno y Emiko Saldívar, respectivamente. Entre los temas que se propusieron con diversas ongs y participantes fueron combatir el racismo, y participar en la campaña: Así vivimos el Racismo 2015”. Es importante impartir talleres de sensibilización del racismo en las escuelas primarias privadas de la ciudad de Oaxaca, como una estrategia para combatir y acabar el racismo hacia los originarios, los grupos indígenas de nuestro Estado; si a los niños los educa la televisión queremos exigir a los medios de comunicación: Revistas, anunciantes y televisoras que no reproduzcan fenotipos diferentes ni ajenos, queremos identificarnos con lo que somos, y lo que transmita sea adecuado a nuestra realidad mexicana, oaxaqueña: no reproducir el racismo y combatirlo mediante programas de calidad, señaló la presidenta de la Fundación para el desarrollo Social Coatlicue A.C.

miércoles, 18 de marzo de 2015

MUCHAS GRACIAS A LUISA REBECA GARZA LÓPEZ POR TUS APORTES VS CRIMENES DE ODIO


Agradecida enormemente del tiempo y la experiencia que ha compartido para estas publicaciones, el trabajo de la ciudadana Luisa Rebeca Garza López, quien merece mi gratitud, con la que estoy aprendido enormemente sobre la rigurosidad que implican los contenidos sobre Sobre la Violencia Basada en Género hacia la Población Trans que posibilita conocerlos, trabajar con ellos y elaborar en un futuro estrategias de acción. Gracias por su excelente disposición a que podamos aprender de su vivencia, siempre pendiente de poder aportar a la labor de la no discriminación por diversidad sexual de la Fundación para el Desarrollo Coatlicue A.C. Por último, y no menos importante, a quienes han confiando en nuestro trabajo, han hecho consultas a través de comentarios en los artículos. Nos han mostrado un camino en el que nos falta mucho por recorrer, y esperamos como fundación ir por buen rumbo. A continuación les dejo las 2 aportaciones de la ciudadana LUISA REBECA GARZA LÓPEZ: Gracias! A T E N T A M E N T E: Maricela Silva Romo

Sobre la Violencia Basada en Género hacia la Población Trans


*Por Luisa Rebeca Garza López/// Las personas transgénero o transexuales (personas trans) somos aquellas que nos fue asignado un rol social masculino o femenino al nacer pero que no corresponde con nuestra identidad de género, es decir, la percepción subjetiva sobre el género al que sentimos pertenecer. En este sentido nos identificamos y vivimos, total o parcialmente, de acuerdo al género que sentimos pertenecer. Hablar de la población trans es hablar de historias de violencias basadas en género tradicionalmente invisibilizadas por una cultura donde lo masculino y lo heterosexual son el centro la norma que determina y sanciona aquello que se aleja de una supuesta “normalidad”. Somos personas donde se vuelve evidente “que el cuerpo es un texto socialmente construido” (Preciado, 2002), donde la idea de alineación entre los conceptos de sexo, género y orientación sexual se resquebraja y se manifiesta la riqueza de la diversidad humana. Un hombre trans puede ser definido como una persona que se le asignó un sexo femenino al nacer pero que se identifica y vive o necesita vivir como hombre. Y este hombre trans puede ser heterosexual, homosexual o bisexual, por ejemplo. Una mujer trans, por el contrario, es una persona que se le asignó el sexo masculino al nacer pero que vive y necesita vivir como una mujer. Y esta mujer trans también puede ser heterosexual, lesbiana o bisexual, por ejemplo. También, dentro de esta diversidad existen personas que no caen dentro del sistema binario hombre-mujer, y se le ha llamado “Queer”. Por ejemplo, recientemente en Australia se ha reconocido legalmente el género neutro. En contraposición a las personas trans, en el campo de estudios de género, se llama cisexual a aquellas personas cuya identidad de género corresponde con su sexo asignado al nacer, es decir, personas en cuyo cuerpo se alinea el sexo asignado y la identidad de género. Las personas trans nos encontramos en una posición donde se da la intersección de múltiples formas de violencia y discriminación: 1. La Transfobia que es un miedo irracional, la aversión, o la discriminación en contra de las personas cuya identidad de género, apariencia, o comportamientos se desvían de las normas sociales (Serano, 2007). 2. El Cisexismo que es la creencia en que el género con el que se identifican las personas trans es inferior o menos auténtico, que el de las personas cisexuales (Serano, 2007). 3. La Homofobia como aversión hacia la orientación erotico-afectiva de una persona trans hacia otra de su mismo género (sea trans o cis).
Julia Serano, transfeminista de California, señala que no existe un grupo de minoría sexual más calumniado o peor entendido que las mujeres trans. Las mujeres trans vivimos adicionalmente un tipo de violencia que viven y padecen las mujeres cisgénero: la misoginia como tendencia a rechazar y rebajar lo femenino y la feminidad. A esta intersección entre misoginia y transgenerismo, Julia Serano la denomina “transmisoginia”. Algunas maneras en que se manifiestan las anteriores formas de violencia hacia hombres y mujeres trans son: 1. La Malgenerización (Serano, 2007): que es cuando nos referimos hacia la persona trans usando el género equivocado, por ejemplo, cuando nos dirigimos hacia una mujer trans en masculino llamándole "el transexual". Otras formas más agresivas de malgenerización y cisexismo se da cuando, por ejemplo, las mujeres trans son recluidas en centros varoniles como los reclusorios, vulnerando su seguridad. 2. La Patologización: cuando la identidad trans es continuamente objeto de estudio por parte de la ciencia médica y sigue formando parte de los manuales para diagnosticar enfermedades mentales desnaturalizando la identidad trans.
1. La Criminalización: cuando las personas trans, pero especialmente las mujeres trans, son detenidas arbitrariamente por causas como "faltas a la moral y buenas costumbres" o por "ejercer la prostitución" a partir de su expresión sexo-genérica. 2. La Objetivación (Serano, 2007): cuando el asunto de nuestros cuerpos se genitaliza y nuestros tratamientos de reemplazo hormonal se convierten en objetos, separándolos de la persona y su dignidad inherente, y son abordados por las personas o los medios de comunicación de una forma pública y sensacionalista en donde se propagan ideas distorsionadas de la identidad trans o bien, se anula la identidad masculina o femenina de la persona. 3. La Hipersexualización (Serano, 2007): cuando entre las personas y los medios de comunicación se propaga la idea que las personas trans transicionamos con la finalidad de "engañar" o "atraer" a las personas heterosexuales y cisexuales. Este tipo de violencia ha sido utilizada para justificar otras agresiones físicas como las mutilaciones, las brutales golpizas y los crímenes por odio pues difunde la idea que las personas trans somos personas "timadoras" 4. La Hiperfeminización (Serano, 2007): que es un tipo de violencia dirigido únicamente hacia las mujeres trans y consiste en la propagación de la idea de que las mujeres trans somos poseedoras o nos esforzamos por poseer rasgos de personalidad que suelen ser asociados de forma despectiva con lo femenino: como seres débiles, pasivos, confundidos, por ejemplo. Esta idea propaga una supuesta frivolidad de la feminidad de la mujer trans por medio de imágenes donde se maquilla, usa zapatos de tacón y vestido. Puede ir acompañada de la hipersexualización donde se destaca la exuberancia de la mujer trans cosificándola al insistir en el tema de las cirugías o donde se destaca que la persona no "parece ser"("no pasa") como la mujer que dice ser.
BIBLIOGRAFIA: Serano, Julia. “Whipping Girl. A Transsexual Woman On Sexism And The Scapegoating Of Feminity”(2007). BI

REFLEXIÓN SOBRE EL EJERCICIO DE LA CIUDADANÍA DE LA POBLACIÓN TRANS.

Por Rebeca Garza / Lo que somos y cómo lo expresamos es un asunto de vital importancia, relacionado con los derechos humanos y por ende con el fortalecimiento de los estados democráticos. Pero es un derecho que sistemáticamente se nos ha negado a las personas trans en México, a excepción del DF.
En el informe llamado “La noche es otro país: impunidad y violencia contra mujeres defensoras de derechos humanos en América Latina” de Red LacTrans, Alianza y What’s Preventing Prevention, el relator especial de las Naciones Unidas, Anand Grover, señala lo siguiente: • “Con la excepción de Argentina, las personas trans no son reconocidas en su identidad de género como el resto de ciudadanas y ciudadanos en América Latina y son condenadas a tener una existencia legal que no coincide con su identidad de género.” • “Los hallazgos del informe revelan una tendencia terrible de ataques sistemáticos y cargados de odio hacia una población vulnerable sobre la base de su identidad misma.” • “En primer lugar, los testimonios y hechos que en él se exponen revelan el alcance sistemático de las violaciones de derechos humanos cometidas contra defensoras de derechos humanos y otras mujeres trans por agentes del Estado. Estas violaciones de derechos, que incluyen ejecuciones extrajudiciales, tortura, tratos crueles, inhumanos y degradantes y detenciones arbitrarias, van más allá de la categorización generalizada de crimen de odio con que estos casos suelen etiquetarse y del contexto de violencia extendida que existe en muchos países de América Latina. Alrededor del 80 por ciento de las activistas trans entrevistadas para este informe reportaron violencia o amenazas a su integridad física presuntamente provenientes de agentes del Estado.” • “Como segundo hallazgo, este informe revela que la penetración de la transfobia, entendida como miedo u odio contra personas trans, a todos los niveles de la estructura de los Estados, está facilitando una impunidad también sistemática ante las violaciones de los derechos humanos contra las activistas y otras mujeres trans. El informe presenta evidencias de esta impunidad que se manifiesta en una cultura de silencio que obstaculiza la interposición de denuncias, en la carencia de un enfoque diferenciado para el abordaje de los casos, en la inoperancia del sistema de justicia, en la existencia de legislación discriminatoria y en la ausencia de una normativa sobre identidad de género.” • “Fallar en proteger a las mujeres (y agregaría, a los hombres) contra la violencia o en enjuiciar a los perpetradores es también una violación de la obligación del Estado de proteger el derecho de las mujeres a la salud, como se interpreta en el Comentario General No. 14 bajo el Artículo 12 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (ICESCR, por sus siglas en inglés).” Para finalizar, me permitiré citar algunas de las recomendaciones a todos los niveles región al, nacional e internacional del mismo relator especial de las Naciones Unidas, Anand Grover: • “Se recomienda el inmediato procesamiento de los casos denunciados y el arresto y enjuiciamiento de los responsables de homicidios, crímenes de odio y otras violaciones de los derechos humanos en razón de la expresión de género, identidad de género u orientación sexual de la persona, o bien su trabajo de promoción y defensa de los derechos humanos.” • “Se insta a los Estados a implementar acciones de capacitación y formación en materia de derechos humanos y género, incluyendo la diversidad de identidades de género, dirigidas a los funcionarios de los sistemas de seguridad y justicia a todos los niveles.” • “Urge la promulgación de una Ley de Identidad de Género, en los países donde no existe, que legitime el derecho a la identidad de las personas trans y que les permita acceder a cambios de nombre y sexo en sus documentos de identificación personal, sin requerir intervenciones quirúrgicas, psicológicas, esterilización, ni ningún otro procedimiento invasivo.” • “Los Estados deben reconocer la identidad de género como categoría para la elaboración de informes demográficos, epidemiológicos, sociales y políticos. En esa línea, es necesario que la policía, el Ministerio Público, los tribunales y el sistema penitenciario reconozcan la categoría transgénero para la recopilación de estadísticas sobre violencia. Sin esa premisa, es prácticamente imposible que el sistema pueda identificar patrones de crímenes de odio cometidos a causa de la transfobia, o violaciones de derechos humanos en contra de defensoras trans, y tomar medidas al respecto.” • “Los Estados deben erradicar la legislación transfóbica, eliminando toda disposición que pueda interpretarse como criminalización del trabajo sexual de las personas trans y como justificación de la detención arbitraria.” • “La provisión de servicios de salud integrales a la comunidad transgénero, y añadiría yo, alejados de toda patologización de la identidad trans.” • “Los Estados y los donantes internacionales deben propugnar el reingreso y la permanencia de mujeres (y hombres, añadiría) trans con su imagen femenina (o masculina) en el sistema educativo a través de políticas que aseguren el respeto por la identidad y la expresión.” Sin el reconocimiento de la identidad de género de las personas trans ni la protección por parte del Estado a vivir una vida sin discriminación y libre de violencia debido a la identidad de género u orientación sexual, la población trans seguirá siendo la minoría sexual más excluida y marginada del ejercicio digno de su ciudadanía y del disfrute pleno de sus derechos humanos. Bibliografía:“La noche es otro país: impunidad y violencia contra mujeres defensoras de derechos humanos en América Latina”. Redlactrans.org. 27 de julio de 213. http://redlactrans.org.ar/site/wp-content/uploads/2013/05/Violencia-e-impunidad-Espa%C3%B1ol.pdf Preciado, Beatriz. “Manifiesto Contrasexual”. Ed. Anagrama (2000).

martes, 10 de marzo de 2015

Discriminación por diversidad sexual y derechos


En nuestro país el respeto a la pluralidad, en todas sus formas, todavía no es una realidad. Las creencias sociales que troquelan la organización de la vida colectiva estigmatizan lo distinto, lo que se aleja de la norma. Y como la norma es la relación heterosexual, las personas con un deseo distinto lo suelen reprimir, esconder o incluso, negar hasta punto de casarse y trata de vivir como heterosexuales. Son pocas las personas que asumen abiertamente su deseo distinto. Sin embargo, el orden simbólico no es inamovible, se ha ido transformando con el tiempo, y lo seguirá haciendo. Así como se calificaban de antinaturales a las mujeres a principios del s. XIX querían ir a la universidad, y las que a principios del XX querían votar y ser votadas, las personas que a principios del siglo XIX se calificaban como antinaturales son las que quieren tener relaciones sexuales con personas de su mismo sexo. Defender la diversidad sexual implica defender la vida democrática de nuestras sociedades. Y como el proyecto democrático, por sí solo, no genera condiciones para que exista libertad sexual es necesario impulsar ciertos acuerdos sociales que eduquen contra la homofobia, impidan la discriminación y fomenten el respeto a la diversidad sexual humana. (Marta Lamas. Tomado de Letra S número 115, febrero de 2006)

Di no a la discriminación por Diversidad Sexual.


La Diversidad Sexual.
Todas las personas de todas las edades, de todas las culturas, de todo el mundo, somos idénticas porque tenemos la misma dignidad humana y gozamos de los mismos derechos humanos. Al mismo tiempo, todos los hombres y todas las mujeres, de todas las edades, de todas las culturas, de todo el mundo, tenemos una identidad propia, personal e irrepetible, que nos hace ser diferentes, diversos y nos lleva a tener deseos e intereses distintos. La diversidad sexual nos habla de la diversidad que encontramos en todas las personas relacionadas con el deseo de relacionarse erótica y sexualmente. La diversidad y el respeto son valores que en los últimos años han sido reconocidos como resultado de la necesidad de una mejor comprensión de las relaciones entre las personas y los grupos. todo aquello que se considere diferente y con este argumento se justifica la discriminación. Una persona intolerante no acepta la pluralidad como marco de convivencia porque no reconoce ni se da cuenta de que en la diversidad se encuentra la posibilidad de enriquecimiento personal y social de todas las esferas personales y sociales. La discriminación que se comete en contra de las personas por sus identidades sexuales es conocida como homofobia. Es decir, la homofobia son todos los actos que limitan el acceso, goce o ejercicio de los derechos humanos relacionadas con estos grupos hasta los actos de violencia. Todas las personas somos victimas de actos de discriminación en algunas ocasiones y comentemos actos de discriminación en otras. Nosotras y nosotros tenemos el poder de hacer que esto cambie. El artículo primero de la Constitución nos protege a todas y todos los ciudadanos contra la discriminación. Identidad sexual La manera como vivimos nuestro deseo sexual está vinculado con lo que somos, no es algo rígido ni permanente a lo largo de nuestra vida, es algo dinámico y cambiante, de la misma manera que nos transformamos nosotras y nosotros mismos. Cuando hablamos de identidades sexuales consideramos que estas se conforman con tres dimensiones: a) la identidad de género; si nosotros/as sentimos que somos hombres o mujeres; b) la orientación sexual; si nos sentimos atraídos sexualmente hacia los hombres, las mujeres o ambos; c) la identidad política: si nos identificamos públicamente como heterosexuales, homosexuales, bisexuales, transexuales, etcétera. Por supuesto estas tres dimensiones nos permiten hacer una serie de combinaciones que cambian a lo largo de la historia de vida de la persona. No hay modelos fijos ni una relación de causa efecto entre las tres.