martes, 3 de marzo de 2009

विओलेंकिया वस लॉस मुजेरेस TRIQUIS

Olvidan diputados de Oaxaca la violencia contra mujeres triquis
Posted el 31 Diciembre 2008 por shinji
Por Lilia Torrentera Gómez

Oaxaca, México.- Ante el permanente clima de violencia en la zona triqui, que a la fecha registra al menos decenas homicidios, secuestros y desapariciones, el Partido de la Revolución Democrática, urgió a instalar una Comisión de Concordia y Desarrollo en esa región. Sin embargo la violencia contra las mujeres triquis fue omitida por los legisladores.

En medio de una movilización convocada por Heriberto Pazos líder del Movimiento Unificador de Lucha Triqui para exigir al Congreso local tomar medidas urgentes ante la serie de violaciones a los derechos humanos los diputados debieron abordar el tema en la última sesión ordinaria del Congreso local.

Fue el diputado Magdiel Hernández Caballero del Partido Unidad Popular denunció las agresiones y amenazas contra militantes del MULT por el agente de San Miguel Copala, Alberto Hernández Morales.

Al respecto el legislador Felipe Reyes Álvarez, del PRD, urgió la creación de una Comisión de Concordia para el Desarrollo de la Región Triqui.

Las mujeres triquis violentadas por grupos políticos

Sin embargo, los legisladores omitieron hablar sobre la serie de homicidios, secuestros y violaciones sexuales que utilizan grupos armados en contra de las mujeres de la etnia triqui en la disputa por el poder político de la zona.

En su intervención el diputado de Unidad Popular jamás habló del secuestro de las indígenas triquis Virginia y Daniela Ortiz Ramírez de 20 y 14 años respectivamente desaparecidas desde el 5 de julio del 2007 y de la nula intervención de la Procuraduría General de Justicia para investigar el caso y dar con los responsables.

Tampoco dijo cómo el 7 de abril del 2008, fueron masacradas las dos locutoras de la emisora comunitaria La Voz que Rompe el Silencio, Teresa Bautista y Felícitas Martínez.

Desde la década de los 70, las mujeres triques ha padecedlo una violencia prolongada.

El contexto político de la región triqui es uno de los más complicados por las continuas disputas políticas de grupos dirigidos por hombres, las mujeres son tomada como un botín político siendo quienes pagan de manera cruel las rencillas entre estos grupos.




No existe respeto a los derechos humanos y menos de las mujeres, muestra de ello, son los casos de violación sexual y de desaparición, que quedan prácticamente impunes.

En el caso de las violaciones sexuales, el rango de edad de las mujeres son entre los 14 y 17 años.

En los años 2006 y 2007, Lucía Martínez Hernández de 14 años y Juanita Ramírez Osorio de 16 años han sido las únicas que se han atrevido a presentar denuncias ante el Ministerio Público, el 1º de Agosto de 2006 y el 27 de Noviembre de 2007 respectivamente.

Las jóvenes agredidas a parte de tener que iniciar un proceso de recuperación psicológico también se ven en la necesidad de realizar un esfuerzo más para la compra de antibióticos para atacar las Infecciones de transmisión sexual productos de las violaciones.

Asi esta violencia no es vista por los diputados, que proponen una instancia de “concordia” más para apaciguar a los líderes de las organizaciones políticas que para defender los derechos humanos de la población civil, en especial de las mujeres y niños inmersos en la violencia generada por la disputa de canonjías políticas en esa zona.



Fuente: http://ciudadania-express.com/2008/12/31/olvidan-diputados-de-oaxaca-la-violencia-contra-mujeres-triquis/

TRIQUIS

TriquisEl nominativo triqui es una deformación del vocablo driqui, de la lengua triqui, compuesto por dri, derivado de dre: "padre", y qui: "grande" o "superior". Al llegar los españoles a estos pueblos, al jefe del clan se le denominaba como señor supremo, que era la máxima autoridad de la comunidad. Los españoles llamaron a estos indígenas "triquis", término que degeneró en triqui. Dios y Jesús se denominan con el término Driqui.

Los triquis de Copala se llaman a sí mismos tinujei, que significa “hermano mio”


Localizacion: El pueblo triqui se sitúa en el oeste del estado, cerca de los límites con Guerrero y se asienta entre los distritos político-territoriales de Juxtlahuaca, Tlaxiaco y Putla, a los cuales pertenecen sus escasas agencias municipales con sus rancherías y parajes. La región comprende dos zonas: la Baja, cuya cabecera es San Juan Copala y se extiende desde las cañadas de Juxtlahuaca hasta el valle de Putla; y la Alta, con cabecera en San Andrés Chicahuaxtla. Si bien la región incluye porciones de la Mixteca Alta y de la Baja, no conviven en ella grupos mixtecos o mestizos ni tampoco existen etnias de otras áreas, debido al tipo de tenencia comunal de la tierra y a su propia organización social.

Numero de habitantes: Según los datos del censo de 1990, la población hablante de triqui ascendía en estos cinco municipios a 12, 604 habitantes. El censo de 1990 registra para todo el estado a 12, 910 personas hablantes de triqui de 5 años y más. Algunos autores calculan hasta 15, 000 triquis en el estado.

Los idiomas triqui, mixteco cuicateco y amuzgo pertenecen a la familia mixteca. Las mujeres son monolingües. La mayoría de los hombres hablan el español y el triqui. Los triquis también hablan mixteco.

Los idiomas triqui, mixteco, cuicateco y amuzgo pertenecen a la familia mixteca, del tronco macro-otomangue. Swadesh los sitúa en la familia mixteca del tronco "Savisa" del grupo otomangue, junto con las familias mazateco-popoluca, mixteca y zapoteca.

Las mujeres de mayor edad son monolingües; la mayoría de los hombres hablan el español y el triqui, al igual que los niños que han estudiado la primaria. Los triquis también hablan el mixteco. En la época colonial se comunicaban en este idioma con los misioneros españoles.

Servicios públicos: El territorio triqui se asienta en una región montañosa de difícil acceso. Se llega a ésta por el camino que va de Agua Fría a Tilapa pasando por San Juan Copala, y el que va de Tilapa a La Luz 17; otro que va de La Luz a Cruz Chiquita y Laguna Seca, y de Llano Nopal a Río Venado.
San Andrés Chicahuaxtla, Santo Domingo del Estado, San Juan Copala, San Martín Itunyoso y San José Xochixtlán cuentan con servicios de agua potable, energía eléctrica y correo. Existe servicio de transporte urbano y de fletes de Tlaxiaco a San Andrés Chicahuaxtla y de Juxtlahuaca a San Juan Copala. San Juan Copala cuenta con un internado de nivel primario y secundario. En San Andrés Chicahuaxtla existe una primaria y una secundaria atendida por maestros mixtecos y triquis.
Los materiales más usados para la vivienda son troncos o tejamanil para los muros, y paja, tejamanil o tallo de plátano (penca) para los techos. La vivienda triqui es cuadrada o rectangular y por lo general consta de una sola pieza de cuatro o cinco metros, usada como cocina, dormitorio y comedor; la única ventilación que tiene es la puerta, hecha también de madera; el techo es de dos aguas y las hendiduras de las paredes son recubiertas con barro, cal y estiércol.
Para la construcción de la casa se prefieren las maderas de huachapil o cedro por su gran durabilidad, a diferencia del encino que se pudre a causa de las lluvias después de unos 15 años. En esta zona son muy pocas las viviendas que están hechas de ladrillo o de mampostería. El único mobiliario son unos banquillos de madera que miden de ocho a 12 cm de altura, un camastro de madera y petates para dormir. La mayoría de las viviendas tienen energía eléctrica y se surten de agua potable de las tomas públicas.

Características económicas: El territorio triqui se asienta en una región montañosa de difícil acceso. Se llega a ésta por el camino que va de Agua Fría a Tilapa pasando por San Juan Copala, y el que va de Tilapa a La Luz 17; otro que va de La Luz a Cruz Chiquita y Laguna Seca, y de Llano Nopal a Río Venado.
San Andrés Chicahuaxtla, Santo Domingo del Estado, San Juan Copala, San Martín Itunyoso y San José Xochixtlán cuentan con servicios de agua potable, energía eléctrica y correo. Existe servicio de transporte urbano y de fletes de Tlaxiaco a San Andrés Chicahuaxtla y de Juxtlahuaca a San Juan Copala. San Juan Copala cuenta con un internado de nivel primario y secundario. En San Andrés Chicahuaxtla existe una primaria y una secundaria atendida por maestros mixtecos y triquis.
Los materiales más usados para la vivienda son troncos o tejamanil para los muros, y paja, tejamanil o tallo de plátano (penca) para los techos. La vivienda triqui es cuadrada o rectangular y por lo general consta de una sola pieza de cuatro o cinco metros, usada como cocina, dormitorio y comedor; la única ventilación que tiene es la puerta, hecha también de madera; el techo es de dos aguas y las hendiduras de las paredes son recubiertas con barro, cal y estiércol.
Para la construcción de la casa se prefieren las maderas de huachapil o cedro por su gran durabilidad, a diferencia del encino que se pudre a causa de las lluvias después de unos 15 años. En esta zona son muy pocas las viviendas que están hechas de ladrillo o de mampostería. El único mobiliario son unos banquillos de madera que miden de ocho a 12 cm de altura, un camastro de madera y petates para dormir. La mayoría de las viviendas tienen energía eléctrica y se surten de agua potable de las tomas públicas. que las autoridades religiosas ignoran por no comprenderlas.
A la par de ese orden clánico y de linaje, así como de la propiedad comunal, coexisten elementos de la religión católica con creencias prehispánicas. Así conviven ritos de propiciación, creencias religiosas autóctonas y prácticas mágicas con cristianas, la iglesia y su sacerdocio. Las actividades religiosas se llevan a cabo en dos niveles: uno, en relación con el templo y las creencias cristianas y, el otro, con las creencias autóctonas. La población cabecera es el centro de los ritos de carácter cristiano, en tanto que las rancherías son importantes para la ritualidad autóctona, debido quizá a que en las rancherías esas actividades se realizan con mayor libertad, a diferencia de las cabeceras, donde se impone la presencia del templo católico. Respecto a las creencias autóctonas, rinden culto a deidades como el Sol y la Luna; veneran y hacen ofrendas a la lluvia, al rayo, a la tierra, al viento, al fuego, a las estrellas y a la deidad del baño de temazcal (baño de vapor, con hierbas, que se realiza dentro de pequeñas construcciones hechas de adobe), que es especialmente importante para la curación de enfermedades. Muchas ceremonias individuales y colectivas se hacen en las cuevas cuando se quiere pedir a los seres sobrenaturales bienestar, buenas cosechas o la solución de problemas.
Caracteristicas políticas: Actualmente el poder político se distribuye entre los "principales" y el cabildo constitucional. Los funcionarios de la agencia municipal son los siguientes: agente municipal, mayor municipal, un secretario, alcalde constitucional (juez penal), capitán de policía, seis regidores; del comisariato de bienes comunales: presidente, secretario, presidente del consejo de vigilancia, tesorero y dos vocales.


Artesanías Las mujeres triquis son buenas artesanas en la confección de ropa en general. Ellas tejen en telar de cintura y en telar horizontal de cuatro estacas, también llamado "malacate"; los vestidos femeninos son para uso personal o para venderlos; también confeccionan camisas y fajas, tejen sombreros de palma y cestos, que destinan al uso personal. Los huipiles se venden en las ciudades de Oaxaca, Puebla y México. En su elaboración participan las niñas, que aprenden a temprana edad a hacerse sus propios huipiles; posteriormente aprenden corte, diseño y el uso de colorantes
Relación con otros pueblosEl intercambio comercial es el espacio de mayor interacción con los mixtecos y mestizos. En los días de tianguis asisten comerciantes de las ciudades cercanas, como Teposcolula, Tamazulapan, Jamiltepec y Huajuapan de León.
Las relaciones de los triquis con los mixtecos y los mestizos son desiguales, porque tanto éstos como aquéllos otorgan a los triquis el más bajo estatus social, se les acusa de ser violentos; sin embargo, esta violencia no es más que la defensa tenaz de su territorio que ha disminuido por el despojo de mestizos y mixtecos adinerados. Esta violencia y su desconfianza sólo son estrategias de defensa de este pueblo